Las declaraciones del fiscal chileno Héctor Barros sacudió a la comunidad internacional al afirmar que el asesinato del teniente venezolano Ronald Ojeda Moreno, refugiado en Chile, fue planeado desde Venezuela como parte de una persecución política.
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En una entrevista a Cesar Taki, director de asistencia social y humanitaria para personas migrantes y refugiadas de PACUHR @pacuhr_org , expresó su preocupación ante la clara evidencia que vincula al régimen de Venezuela con actividades criminales internacionales. Taki destacó la urgencia de que la comunidad internacional condene de manera contundente estos actos y tome medidas severas.
Para Taki, este hecho representa un grave riesgo para los venezolanos que se encuentran asilados o refugiados fuera de su país. “La diáspora venezolana ahora vive con el temor constante de ser blanco de la represión del régimen, incluso estando en el extranjero”. Ante esta situación, Taki hizo un llamado a los países receptores de venezolanos para que refuercen sus políticas de protección y brinden seguridad jurídica y apoyo psicológico a los afectados.
En cuanto a las acciones que deben tomar los países receptores frente al Estado venezolano, se destaca la necesidad de fortalecer las políticas de asilo y refugio y de entender que los venezolanos son personas Refugiadas para todos los efectos.
Finalmente Cesar Taki advirtió que el asesinato de Ronald Ojeda Moreno en Chile no solo es un acto de violencia individual, sino que representa una grave amenaza para la comunidad venezolana en el extranjero. Es imperativo que la comunidad internacional tome medidas decisivas para garantizar la protección y seguridad de aquellos que han huido de la tiranía en Venezuela.
